Los que de alguna manera seguís
este blog ya os habréis dado cuenta, su actividad ha disminuido en los últimos
meses. Lo ha hecho de manera paralela a mis salidas en bici, simplemente no hay
nada que contar.
Poco a poco las sensaciones han
ido cambiando, he perdido la motivación y el efecto
balsámico que sobre mí tenían esas maravillosas salidas pedaleando por el monte... ahora más preocupado por evitar una caída, que de disfrutar.
Las salidas con los compañeros, cada vez más esporádicas, ya no me llenan como antaño. Y las pocas expectativas
de poder participar en alguna cicloturista el próximo año, me han dejado huérfano de objetivos.
Las bicis apiladas en un rincón, con alguna avería, de la que de momento ni hay posibilidad ni intención de
reparar.
Es el momento de hacer una pausa,
seguiré pedaleando, la bici es una buena forma para
moverse por la ciudad y de hacer ejercicio sano y moderado. Pero dudo que eso
pueda traducirse en alguna entrada en este blog.