Siempre que salía por Llanes
terminaba haciendo las mismas rutas. Por eso, este verano había investigado
nuevos caminos y zonas del Concejo que
no conocía. Así pues, solo era cuestión
de unir los distintos tramos de los tracks para diseñar una ruta por el concejo
de LLanes, a priori muy divertida.
Sábado 3 de Noviembre, las previsiones del
tiempo no eran buenas y acertaron plenamente, ¡vaya día de perros! Aún así ya
venía preparado con la equipación para días lluviosos.
Primera parte de la ruta, dirijo
mis pedaladas hacia La Mañanga, desde que descubriera esta zona, en la ruta de
hermanamiento Asturcon BTT-CC Altitud ha sido una de mis zonas favoritas para
hacer mountainbike en Llanes. En esta ocasión, había introducido varios caminos y senderos nuevos que la hacían muy interesante.
Tras rodear Porrua, en vez de
tomar el clásico camino que sube hasta la zona, tomo un sendero por medio del
bosque, muy estrecho, pensando que quizás en el seno del bosque pudiera cobijarme de la
intensa lluvia que caía desde que salí.
Al poco me encuentro con dos
perros de caza y no muy lejos escucho varios disparos, parece que he llegado en
el momento álgido hay una batida de cazadores, es momento de darse la vuelta
pensando en que algún día algo tengo que escribir sobre los cazadores y el
mountainbike… anécdotas no faltan.
Una vez desbaratada la
alternativa del sendero del bosque sigo por el clásico camino que sube desde
Porrua . Sigo hasta el punto donde enlazo de nuevo con el track marcado, un
camino ancho siempre en subida con tramos arenosos que ralentizan la marcha.
Enlazo con otro tramo por sendero
que alterna subidas con bajadas juguetonas rodeado de castaños y algún ocalito.
Voy a desembocar en un camino bien conocido que circula por una especie de río
seco lleno de piedras y cantos rodados y que por momentos me obligan a hacer verdaderos
equilibrios para no poner pie a tierra.
Entro en un sendero arenoso,
desde hace ya algún tiempo acondicionado por los “moteros”, convirtiéndose en
un divertido circuito donde no es nada descartable que en algún momento tú
rueda pueda quedar bloqueada por la arena y vayas al suelo… que alguna vez me
ha ocurrido.
Me estoy divirtiendo de lo lindo,
pedaleo con fuerza para no quedarme atascado, subo, bajo hasta que escucho un
fuerte “crack”, por la fuerza de la inercia sigo avanzando pero me he dado cuenta
que voy pedaleando “al aire” miro hacia abajo a ver si la cadena sigue en su
sitio…ahí sigue. Paro y miro con detenimiento la rueda trasera, no hace falta
mucho para darse cuenta que he roto el núcleo y ahora la corona suelta, se
mueve libremente hacia delante sin transmitir su movimiento a la rueda.
La verdad, tarde o temprano tenía
que ocurrir, desde la caída que había sufrido hace ya un año, me había estado
dando problemas y gracias a la pericia de los mecánicos había conseguido
alargar un poco la vida de este.
Una hora escasa de ruta y 16 kms
recorridos y daba la ruta por finalizada. Ahora el problema era otro, como
volver a Llanes. La primera parte era fácil, pues en su mayoría es cuesta abajo
y puedo dejarme caer sin problemas. Así llego a Balmori, ¿y ahora? Ya no hay
bajadas de las que me pueda aprovechar y debo estar a unas dos horas andando de
Llanes.
Sigue lloviendo intensamente, así
que me resguardo en la parada de autobús mientras analizo que puedo hacer. Ante
mi desfilan multitud de cazadores que ya van de recogida, seguramente por las
inclemencias meteorológicas.
Pronto llego a la conclusión de
que la única alternativa es llamar a mi novia para que venga al rescate con el
coche y así pueda regresar sin problemas. El resto, ya os lo podéis imaginar
esperar a que llegara, cargar la bici en la baca y rumbo a la villa.
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