viernes, 14 de marzo de 2014

SACA LA LENGUA, LEVANTE LOS BRAZOS, SONRIA...

Una décima de segundo para comprobar la fragilidad del cuerpo humano, te desplomas sin poder evitarlo. Intentas aferrarte con el brazo, pero compruebas con terror que el cuerpo te ha abandonado.

Gritas con todas tus fuerzas, pero difícilmente puedes articular palabra inteligible que salga del rictus paralizado de esa boca que creías tuya y ya no lo es. Aún así, intentas repetir una y otra vez “Llama al 112, llama al 112” … impotencia, desasosiego, abandono…

El equipo médico no tarda en llegar y empieza el ritual “Saca la lengua y muévela a la derecha y a la izquierda, levante los brazos con las palmas hacia atrás, sonría, coja mis manos y apriételas con todas sus fuerzas… ¿sabe cómo se llama?¿donde vive?”



Estoy en la ambulancia, todo el mundo se mueve a mí alrededor de manera sincronizada. Vía en el brazo izquierdo, pinchazo en el dedo de la mano izquierda y pinza en el dedo de la mano derecha. Puedo ver mis altas pulsaciones fruto del estres.

Doy la bienvenida a mi nuevo tick, tamborileando con los dedos de mi mano izquierda, para sentirme seguro de que vuelvo a ser el dueño… al menos por un instante. El cuerpo vuelve a abandonarme, es cuando te das cuenta de que puedes estar ante los últimos momentos de tú vida, todo pierde sentido y el estres desaparece, me encuentro muy tranquilo, ¿que me estarán metiendo por la vía?

“Saca la lengua, levante los brazos, sonría, …”

Dicen que me llevan al Hospital de Cabueñes, dicen que hay que cambiar de ambulancia y antes de que me dé cuenta el equipo de la primera ambulancia me despide con una sonrisa en los labios, puedo ver la tristeza en sus ojos, son incapaces de ocultarla mientras me meten en la nueva ambulancia. Un chico me habla…

“Saca la lengua, levante los brazos, sonría…”


Electrocardiograma, oxigeno y nuevo cambio de planes “Hay que llevarlo a Arriondas” informan al conductor. Mientras me sacan de la ambulancia, veo a todo el mundo esperándome en la puerta de urgencias, alguien se habrá chivado de que vengo, que importante soy, jaja …no tiene gracia, lo sé… ¿y sabéis lo que me dice una chica vestida de blanco?

“Saca la lengua, levante los brazos, sonría, …”

Atiendo a cada movimiento a mi alrededor y entre todas las voces pronto distingo la de un hombre que da órdenes claras y concisas “Radiografía, Scaner,... “ Se acerca a mí, ya sabéis lo que me dice:

“Saca la lengua, levante los brazos, sonría, …”

¿Edad? ¿fumas? ¿bebes? ¿haces deporte? ¿Qué deporte? ¿por el monte? ¿Soplao, QH, ….? ¿Tiempo? Ummmm. Puedo leer su mente, está diciendo “Tú no deberías estar aquí”… pero aquí estoy!!!

¿Última vez que saliste? ¿Esta mañana?¿Te has dado algún golpe? … De repente, como en un sueño me veo bajando por el sendero, voy esquivando piedras y ramas a derecha e izquierda y como a cámara lenta recuerdo aquella rama golpeando mi cuello, no le di importancia seguí el descenso… ¿no es posible? … ahora lo siento, me duele mucho el cuello.

Primera noche, supervivencia, la noche es eterna, no puedo ni quiero dormirme, esto es una pesadilla y voy a despertar, esto no puede sucederme a mí… recuerdo la frase “Si algo me pasa no dejéis que mi mujer venda las bicis por lo que dije que me costaron” … no es el caso, bien sabe ella lo que me costaron y todos los sacrificios que tuve que hacer para conseguirlas.


Me trasladan a Avilés, entro en urgencias del Hospital de San Agustín, miro a todas partes buscando a Ray, compañero de club, quiero informarle de que he dejado el ciclismo... a lo grande. Solo se dirige a mí una chica que tras leer unos papeles me toma la tensión y me dice….

“Saca la lengua, levante los brazos, sonría…”

En la habitación me recibe un doctor, se encuentra leyendo una hoja y sin levantar la mirada pregunta - “¿ciclismo de competición?”  Me río, yo solo compito contra mí mismo, soy un aficionado al que le gustan las pruebas de fondo en carretera y mountainbike.

Añado a modo de pregunta sonda … “pero eso ahora ya se acabo”. Su respuesta en forma de cara de poker me lo ha dejado claro, difícilmente podré volver a participar en una de esas. Adios Viveiro, Monegros, Soplao, QH, Grand Raid, … dejo muchas asignaturas pendientes.

Me paso toda la noche pensando en ello, pedalear no es una simple afición, al final se convierte en una forma de vida, ¿cómo podre sobrevivir? Por la mañana me despiertan dos doctoras y casi sin mediar palabra, ya sabéis

“Saca la lengua, levante los brazos, Sonría, …”


Mientras no se le haga una resonancia magnética va a tener que mantener reposo absoluto, no se mueva, podría tener un coagulo en su cerebro. Hay que evitar que se desplace y pueda ocasionar más daños.

Dos días con sus dos noches sin moverme, ¿Cómo moverse cuando tal amenaza descansa sobre tus actos? me duele todo el cuerpo y sobre todo mi maltrecho cuello, es insoportable.

Por fin, llega la resonancia magnética y se van sucediendo las pruebas de todo tipo: análisis de sangre, electrocardiogramas, ecografías, resonancias varias, Holter y de más controles, sin olvidar el inestimable cuidado de enfermeras y médicos y sus continuos controles y atenciones.

Un nuevo día, el sol se cuela por la ventana, es increíble tanto tiempo esperando el buen tiempo, pedaleando con lluvia, frío y viento. Y ahora que viene el buen tiempo permanezco tumbado en un hospital.


Los resultados de los análisis y pruebas no consiguen encontrar ninguna relación directa con el episodio vivido, no me encuentro en ningún grupo de riesgo y todo parece indicar que el golpe sufrido en el cuello durante mi salida betetera tuvo la culpa.

Todos sabemos que el mountainbike es una actividad no exenta de riesgo y así lo asumimos. Sigo pensando que merece la pena. El contacto con la naturaleza, poder admirar esos lugares y paisajes, la sensación de libertad... Somos unos privilegiados y todo ello mientras realizamos una actividad física que nos mantiene en forma y fortalece nuestro cuerpo.


En breve volveré a compartir pedaladas con vosotros, no lo dudéis, aunque de momento debo tomármelo con calma y empezar de nuevo poco a poco. Saludos.





10 comentarios:

  1. Muy bonito ,ahora la pregunta es ....es cierto? O es novela
    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lamentablemente es cierto, fui a visitarle al hospital.

      Eliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  3. mucho animo trapist!!!!!!, todos los beteteros estaremos esperando volver a verte por los molinos, un baldao que te sigue

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Hugo,
      Perdoname, ahora no me doy cuenta si te conozco, aunque en varias ocasiones he compartido kilómetros con los Baldados...buena gente.
      Nos vemos

      Eliminar
  4. Helado me has dejado.
    Menos mal que he querido entender que al final solo un susto.
    Apuntate la fecha en el calendario como segundo cumpleaños.

    Animo!!!!!!!!!!!!!
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si Theo...un susto, pero vaya susto!!! ... ahora me acompaña allá donde voy. Estoy bien y sin secuelas aparentes, pero la experiencia realmente horrible.
      Esta semana que viene intentaré subirme a la bici, a ver si sé o tengo que aprender de nuevo.
      Y luego depende como vaya, ya veremos...
      Gracias y seguiré tus andanzas en tú blog.
      Saludos.

      Eliminar
  5. Leí tu crónica hace unos días, y ayer volví a leerla en una revista firmada como anónimo, enhorabuena.
    Un saludo y a cuidarse para Monegros.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, ya veremos que tal se nos dan los Monegros, será la primera vez que vaya y no tengo muchas referencias

      Por cierto, buen blog el tuyo....llevo media hora viendo tus fotos. Muy buenas.

      Saludos

      Eliminar
  6. Lo vi en Facebook y ahora al leerlo vuelvo a darme cuenta de lo importante que es disfrutar de la vida y si te da una segunda oportunidad aprovechala. Yo , soy Julio , en eso estoy . Hoy 40 km por los caminos del canal de Isabel II en Madrid y un monton de retos y objetivos. Hace 4 años nadie apostaba por que volviera a casa y no solo he vuelto sino que disfruto mucho de mi nueva vida . Animo y un saludo ahhh nuestra frase en el centro de rehabilitacion de Madrid (CEADAC ) "POCO A POCO TODO SE CONSIGUE"

    ResponderEliminar